Mediante una terapia individual y tras detectar los factores causantes del malestar, buscamos la modificación de los mismos, siendo muy importante la colaboración de la persona con los psicólogos y que tenga una actitud positiva hacia el cambio.
TRASTORNOS DE ANSIEDAD
La ansiedad se manifiesta de formas distintas, algunas más concretas y localizadas y otras más difusas y difíciles de reconocer. Una guía básica para saber si se está sufriendo este problemas es la existencia de determinados síntomas como irritabilidad, tensión muscular, preocupaciones excesivas, miedos concretos( hablar en público, salir a la calle, afrontar determinadas situaciones, etc.), obsesiones y compulsiones, síntomas físicos de mareos, sofocos, alteraciones del sueño, etc...
DEPRESIÓN Y OTROS TRASTORNOS DEL ÁNIMO
Se puede manifestar con la aparición y persistencia de síntomas como tristeza, cambios frecuentes en el estado de ánimo, fatiga, sentimientos de inutilidad o de culpa, dificultades de concentración, insomnio, falta o exceso de apetito.
TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD
Hay personas que a lo largo de su vida, y no sólo en momentos puntuales, manifiestan malestar y problemáticas constantes en sus relaciones interpersonales. Cuando esto se debe a unos patrones rígidos y alterados en la forma de pensar, sentir y comportarse, podemos estar ante un trastorno de personalidad que provoca un malestar intenso y dificulta el desarrollo de la vida diaria de la persona.
TRASTORNOS PSICOSOMÁTICOS
En ocasiones los problemas físicos son manifestaciones de problemas psicológicos, por lo que acudir al especialista médico, no garantiza la determinación de la causa orgánica.
Los estados de ansiedad, estrés, las preocupaciones continuas, etc, deterioran el sistema nervioso reflejándose en alteraciones orgánicas como úlcera, pérdida del cabello, cefaleas, dermatitis, sudoración excesiva, etc...
ALTERACIONES DEL SUEÑO
Se aprecian en síntomas como el insomnio, hipersomnia, pesadillas, alteración del ritmo sueño-vigilia.
ADICCIONES
Trabajamos el manejo de la impulsividad, agresividad y autocontrol en las situaciones estresantes provocadas por distintas adicciones como la ludopatía, adicciones a Internet, alcohol, drogas, etc…
DEFICIT EN HABILIDADES SOCIALES Y PROBLEMAS DE RELACION INTERPERSONAL
No es necesario tener problemas emocionales graves para beneficiarse de la ayuda de un profesional de la psicología. La timidez, el aislamiento social, la inseguridad, la dificultad para establecer relaciones interpersonales satisfactorias, acaban produciendo una insatisfacción personal, al no desarrollar su potencial social. A través del entrenamiento en habilidades sociales se puede corregir este déficit y lograr una mayor satisfacción en esta área.
PROBLEMAS ADAPTATIVOS
Estos problemas se manifiestan por la presencia de cambios de estados de ánimo, tensión, preocupación, irritabilidad, disminución del rendimiento laboral, todo esto asociado a un acontecimiento estresante como una separación, cambio de trabajo, de residencia, enfermedad, nacimiento de un hijo, etc...
PROBLEMAS SEXUALES
Se pueden reconocer por la existencia de síntomas como la falta de deseo o excitación, dolor en las relaciones sexuales, impotencia, eyaculación precoz, etc..
TRASTORNOS ALIMENTARIOS
Los más frecuentes son la anorexia, bulimia, obesidad y trastorno por sobreingesta.
Se ha demostrado en muchos estudios realizados que la terapia de orientación cognitivo-conductual es la más eficaz para eliminar estos problemas; no obstante, en el caso de la anorexia, es conveniente que antes de entrar en la fase cognitiva, nos propongamos como primer objetivo el aumento de peso y la normalización del estado físico.
NEUROPSICOLOGÍA
El neuropsicólogo clínico es un profesional de la salud dentro del campo de la psicología, cuyas funciones son la evaluación, diagnóstico, tratamiento y/o rehabilitación de aquellas funciones cognitivas, conductuales y emocionales que hayan podido verse afectadas debido a trastornos derivados del daño cerebral, ya sea su origen congénito, adquirido o degenerativo.
El neuropsicólogo clínico utiliza uno o más procedimientos, técnicas o test psicológicos, neurológicos, cognitivos, conductuales o fisiológicos para evaluar las destrezas y alteraciones cognitivas, emocionales y conductuales y su relación con el funcionamiento normal o anormal del sistema nervioso central, además de utilizar la información proporcionada por otros profesionales de la salud para identificar, planificar y aplicar estrategias de intervención.
Los problemas o patologías que atienden van desde accidentes cerebrovasculares, neoplasias, infecciones y procesos inflamatorios del SNC, alteraciones degenerativas, traumatismos craneoencefálicos, alteraciones relacionadas con la desmielinización, deterioro cognitivo, alteraciones del aprendizaje, así como las relacionadas con la medicina general o la cirugía.